El cáncer de piel es el crecimiento descontrolado de células anómalas de la piel.  Sobreviene cuando el daño en el ADN de las células de la piel (provocado, principalmente, por la radiación ultravioleta procedente de la luz solar o de las camas de bronceado) desencadena mutaciones o defectos genéticos que hacen que las células de la piel se multipliquen rápidamente dando lugar a tumores malignos.

 

9 de cada 10 casos de cáncer de piel se deben a la exposición solar.

 

Recomendaciones para prevenir el cáncer de piel

   Evitar el sol directo de 10 a 16 horas.

  Evitar las quemaduras de sol.

  Evitar las camas de bronceado/solares UV.

  Usar sombrero y mangas largas, y anteojos con filtro UV.

  Usar protector solar FPS 30 o más, y reaplicarlo cada 2 horas.

  Mantener a los recién nacidos alejados del sol. Las cremas solares solo pueden aplicarse a niños de más de 6 meses de vida.

  Examinar tus lunares. Y acudir al médico, cada año, para que realice un chequeo médico profesional de la piel.

 

Si trabajás en la calle o al sol, recordá ponerte protector solar media hora antes de la exposición.